Para recapitular solo hace falta un recuerdo donde menos lo esperas. El bloqueo magistral de hechizos locales vá cayendo pieza por pieza y no esperas que ocurra lo contrario. Basta un acento. Una palabra, un holograma o una confesión. Así me sientes mas seguro. Si por mi fuera dejaría todo pero no basta de mi. No se satisface la necesidad con solo un sujeto amortajado por las circunstancias. Lo siento pero sigo hacia delante. Si pudiera llamaría ahora mismo y apostaría el todo a un tercero en armonía, en elocuencia, en belleza que no se esconde pero tanto me atrae. Constante de actualidad con tendencia a posible.

Creo que me he vuelto adicto a los vaivenes de colores, al blanco mas puro en contraste y al brillo tán lúcido que lagrimea destellos desde la penumbra.