jueves, septiembre 28, 2006

7:30

Los algodones se terminan y yo aumento mis deseos de rescatar otras cosas. Por estos rumbos escacean desde hace tiempo suertes y destinos: Humillante decepción para pitonizas. Es hora de apagar todo, supongo. Por eso miro constantemente bajo mi cama, para rescatar algun signo pequeñito de lo que pudiera existir aún. No lo encuentro, lo siento. Sigo durmiendo mi siesta hasta el dia siguiente.

Etiquetas: